TRAIT INTROGRESSION
El Trait Introgression es una técnica valiosa en la agricultura moderna, ya que permite la incorporación al cultivo de maíz (y otros) de rasgos deseables, como resistencia a plagas, tolerancia a enfermedades o a herbicidas, mayor rendimiento, o adaptación a condiciones ambientales específicas.
Para el caso puntual del cultivo de maíz, la introgresión de traits debe realizarse en las líneas parentales. En Rusticana conocemos la importancia de llevar adelante este proceso de manera cuidadosa y controlada para garantizar la seguridad y la eficacia del servicio que ofrecemos.
Los pasos clave en el proceso de introgresión de rasgos en líneas de maíz:
Selección de la fuente del rasgo deseado
En primer lugar, los fitomejoradores identifican una variedad de maíz o una especie silvestre que posea el rasgo deseado. Este rasgo puede ser, por ejemplo, resistencia a una enfermedad en particular, como el maíz transgénico Bt, que produce una proteína insecticida, o resistencia a herbicidas, entre otros.
Cruzamiento
Se realiza un cruzamiento controlado entre la variedad receptora (que generalmente es una variedad comercial o una línea de maíz en uso) y la variedad fuente que posee el rasgo deseado. Durante este proceso, se asegura que la descendencia resultante herede el rasgo de interés de la variedad fuente.
Selección de descendientes
A través de pruebas de selección y marcadores genéticos, se identifican las plantas descendientes que llevan el rasgo deseado de la variedad fuente. Este es un proceso crítico para garantizar que se mantenga el rasgo deseado mientras se eliminan otros genes no deseados de la variedad fuente.
Retrocruzamiento
Para refinar aún más la línea receptora y eliminar cualquier contaminación genética no deseada de la variedad fuente, se realizan retrocruzamientos repetidos. En cada ciclo de retrocruzamiento, se cruza la descendencia seleccionada con la línea receptora original y luego se seleccionan nuevamente las plantas que llevan el rasgo deseado.
Pruebas de rendimiento y adaptación
Las líneas resultantes se someten a pruebas exhaustivas para evaluar su rendimiento y adaptación a las condiciones locales de cultivo. Esto es fundamental para garantizar que las nuevas variedades de maíz con el rasgo introducido sean viables y productivas en un entorno específico.
Lanzamiento comercial
Una vez que se ha completado el proceso de introgresión y se ha confirmado que la nueva variedad de maíz cumple con los estándares de calidad y rendimiento deseados, puede ser lanzada comercialmente para su uso en la agricultura.